La casa de aldea La Torre surge a partir de la rehabilitación de un edificio de principios de siglo, enmarcado dentro de la llamada arquitectura de indianos. En la finca que rodea el hotel y la casa de aldea, de unos 9.500 metros cuadrados, el cliente podrá disfrutar de amplias zonas ajardinadas, numerosos árboles centanarios y frutales, terrazas, cafetería y aparcamiento.