Se sitúa en el extremo más oriental la provincia de Huesca. Sus 33.267 ha engloban los municipios de Benasque, Gistaín, Montanuy, Sahún y San Juan de Plan. Declarado en 1994. Ver Mapa
Este territorio de alta montaña abarca numerosos picos que superan los 3.000 m de altitud, como el Aneto (3.404 m), el Posets (3.375 m), el Enmedio (3.350 m) o el Maladeta (3.308), y posee además una gran diversidad geológica y paisajística, en la que se incluyen 13 glaciares, 95 lagos de montaña (ibones) de origen glaciar y cascadas de gran belleza. Por encima de los 2.000 m las temperaturas se recrudecen y las mínimas descienden hasta los -30ºC, con medias anuales cercanas a los 0ºC. En verano, las máximas rara vez superan los 25ºC.
En el fondo de los valles los ríos quedan escoltados por bosques de ribera de alisos y sauces. Las laderas inferiores están cubiertas por pino silvestre y abeto, o roble y haya, según la zona. Por encima de los 1.800 m se extienden los bosques de pino negro, con gran variedad de musgos y helechos, y sobre los 2.000 m aparecen prados subalpinos, que preceden a los roquedos, ventisqueros y neveros de las cimas. El quebrantahuesos y el urogallo suponen dos de las joyas de la fauna del parque, al encontrarse ambos en serio peligro de extinción.
Merece la pena visitar la Villa de Benasque y la Villa de Plan, dos de las más emblemáticas y ancestrales de la región. Una vez allí también se puede aprovechar para esquiar en las pistas.
