Ocupa el sector central de Sierra Morena y con sus 177.484 ha es uno de los más extensos de Andalucía, integra diez municipios sevillanos total o parcialmente. Fue declarado en 1989. Ver Mapa
Todo el Norte de Sevilla está ocupado por esta sierra, que describe un plano inclinado desde la linde con la provincia de Badajoz hasta el valle del Guadalquivir. Predominan los materiales metamórficos, como la cuarcita o la pizarra, con afloramientos de rocas calcáreas en el sector oeste. Sus terrenos se alzan entre los 260 y los 968 m de altitud, con relieves abruptos y fuertes desniveles. Además de los dos ríos que provienen de la Sierra Norte (el Viar y el Huéznar), y que dan lugar a varios embalses, la faz pétrea está surcada por arroyos y torrenteras, que han cavado gargantas dando lugar a formaciones cársticas en la zona occidental de suelos calizos.
La dehesa de alcornoque y encina ocupa la mayor parte de los terrenos del parque, aunque en los parajes más húmedos crecen rodales de quejigo y castañar. En el sotobosque de estas formaciones arbóreas aparecen arbustos como el lentisco, el madroño o el acebuche, además de repoblaciones forestales de pino y eucaliptus. A la vera de los ríos hayamos un bosque de ribera muy frondoso compuesto por fresnos, olmos y sauces. la fauna local está bien conservada, sobre todo en lo referente a las aves y mamíferos, entre los cuales se cuenta el lince ibérico, en serio peligro de extinción.
La Sierra Norte es también rica en yacimientos arqueológicos y en ella se han encontrado enterramientos en dólmenes, así como numerosos asentamientos y necrópolis de la época romana. Asimismo, existen cuevas con restos de civilizaciones prehistóricas como las Cuevas de Santiago, en Cazalla de la Sierra, que forman un complejo con diferentes entradas y donde habitan varias especies de murciélagos, o la Cueva de los Covachos en Almadén de la Plata.